sábado, 2 de junio de 2012

Debate valórico

El día de hoy, en clases de psicología, debatimos en el curso sobre la píldora del día después, la pena de muerte y la educación gratuita. 

Mala fue mi impresión sobre mis propios  compañeros de aula desde el comienzo, cuando el profesor preguntó qué opinábamos sobre la píldora del día después. Algunas dijeron que era útil, y luego el tema se fue tornando denso y absurdo, cuando comenzaron a hablar que la mujer podía usarla indiscriminadamente, y que por lo tanto no era recomendable repartirla. Quedé atónita.

Luego, se habló del tema de la pena de muerte, (en lo que estoy en absoluto desacuerdo). Algunos decían que sí, lo que se transformó en mayoría, debido al tema de la mantención de los delincuentes dentro de las cárceles, además hacinamiento carcelario.

Posterior a eso, se tocó el tema de la gratuidad escolar. Ahí quedó la embarrada, porque yo dije altiro que sí estaba de acuerdo con que la educación sea gratuita, y saltaron como diez encima, "argumentando": "por qué tiene que ser gratis para todos, si no se puede porque el rico no lo merece porque puede pagar", o también cosas así como "es que si al pobre le das un lapiz mina un día, al otro día va a querer un lapiz pasta, y se va a enojar si no se lo das, porque cree que es su derecho". Eso, me ardió en todo el cuerpo. Luego, el profesor les indicó que el tema del crédito con aval del estado es realmente sólo ganancia pra los bancos y que el estado termina siempre pagando la déuda, por lo que significa un gasto enorme, y que él sí creía que la edcación debe ser gratuita, y que debe existir un fin al lucro por parte de las instituciones educacionales. Se quedaron callados.

Lo que me sorprendió, y esto es a lo que quiero llegar, es que cómo es posible que hombres y mujeres, la mayoría sobre los 25 años, piensen de esa manera, por cuanto (pienso), es increíblemente grande la ignorancia respecto a los temas de discusión que tocamos. En clase no dije todo lo que tenía que decir, porque en realidad no me iba a poner a discutir con unos simios parlantes.

Acá quiero desahogarme y decir: La píldora del día después es una opción en caso de emergencia a la que debe optar cualquier mujer, en caso de violación, es obligatorio un aborto. El aborto debe ser legal en nuestro país, para velar por los derechos de las mujeres. Lo que no necesariamente significa que el género va a "abusar" de este derecho, como creen y seguirán creyendo varios de mis compañeros.

Sobre la pena de muerte, quiero decir que quedé también deprimida por sus opiniones, porque pienso que la pena de muerte no se puede aplicar nunca más. Ellos decían "ay, que a los ladrones les corten los dedos", o sea!! ahí me quedé con la bala atravesada y decir que cómo es posible tal cosa, no puede ser que crean eso, porque quien está encarcelado ya sufre por su encierro, y si se quiere rehabilitar (lo que mi país no garantiza con su sistema carcelario), cómo es que va a trabajar si le cortaron los dedos o su mano?. Es el Estado quien es el responsable de la delincuencia, por lo tanto, DEBE hacerse responsable de mantener una cárcel.

En el tema de la gratuidad escolar, quiero expresar que opino que debe ser un derecho de todos estudiar de manera gratuita, eso significa no segregar, ya que estará estudiando el hijo de quien gana 100.000 como el de que gana 1.000.000, (por dar un ejemplo), pero antes de eso, de debe regular la calidad de la educación, que el lucro sea penado y fizcalizar que los colegios e instituciones de nivel superior nunca más se aprovechen del sistema, enriqueciéndose a costa de un derecho ciudadano (universidad del mar, por ejemplo).

El Estado es quien debe garantizar educación de calida y gratuita, para evitar segregación, y que con esto, no haya marginalidad, ni delincuencia. Una persona no sobrevive con $180.000 al mes, es por esto que los jóvenes no terminan el colegio, no se sienten motivados a estudiar, para qué si van a salir de cuarto medio para ser reponedores de supermercado ganando una miseria de plata; van a preferir salir a delinquir, van a preferir las drogas, el narcotráfico, porque van a tener la platita constante y sonante a diario, sin esforzarse 45 horas a la semana, trabajando sábados, domingos, y esperar el día del pago y recibir una miseria de sueldo. Se trata de garantía de calidad de vida, una cosa lleva a la otra, con segregación, obtenemos delincuencia. No se trata de mantener al pobre, se trata de hacer que la persona que tiene menos posibilidades de salir adelante, logre hacerlo, a base de estímulos, sabiendo que su sacrificio obtendrá frutos.

Apostaría además, que quienes estaban (en el aula), a favor de la pena de muerte y en contra de garantizar igualdad de derechos a las personas, son creyentes, además de xenófobos. Una contradicción de valores profundamente increíble. Yo no creo en dioses, por lo tanto el libro sagrado me lo paso por el forro, sin embargo, no creo tener mis valores tan trastocados como ellos, que apostaría, hasta rezan en la noche.